Santiago de Chile, 10 de mayo de 2012

Mediante la presente nos dirigimos a usted con el objetivo de manifestar nuestra preocupación, como socios e hinchas del Club Social y Deportivo Colo Colo, por el complejo momento que atraviesa nuestra institución, tanto en lo deportivo como en lo institucional.

Para nadie es un misterio que las divisiones existentes al interior de la concesionaria, sumado al quiebre de la directiva de la corporación, están provocando un gran daño a Colo Colo, lo que de una u otra forma, influye en el rendimiento del plantel de honor.

Estas luchas de poder en ambas instancias directivas, la evidente ingobernabilidad y la carencia de un plan deportivo acorde a lo que corresponde a la institución deportiva más grande de este país, nos ha llevado entre otras cosas, a sufrir hace unas semanas la derrota más deshonrosa en los 87 años de historia del club.

Los socios e hinchas miramos desde fuera como día a día el club se hunde en peleas intestinas, y creemos que llegó el momento de que usted tome cartas en el asunto.

Desde la quiebra del club, los socios hemos sido sistemáticamente dejados de lado, no tenemos ninguna instancia de participación, y parecemos condenados a permanecer como espectadores de la debacle. Es por ello que solicitamos a usted como Presidente de la Concesionaria Blanco y Negro S.A., y miembro del directorio de la corporación, que tome el rol que le corresponde y se sume con todas sus fuerzas a la petición de amnistía al padrón histórico que venimos a solicitar.

El club no saldrá de su actual estado si no es con la suma de todos sus estamentos, y se requiere la participación activa de sus bases, tanto en la presencia masiva en los estadios, como siendo parte en la labor institucional.

Vemos esto como la única salida a la crisis, si el directorio de la corporación y la concesionaria siguen marginando a la gente, que es la que hace realidad la existencia del club, no hay salida posible, y lo instamos a considerar la presente solicitud, para que sea recordado como quien inicia el levantamiento de la institución y no como el que terminó de hundirla

Atentamente,

Las y los abajo firmantes.

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